Afírmese en las promesas de bendición para su vida

Base Bíblica: Génesis 15:1-19

Introducción:

Dios tiene grandes planes para nosotros. Él da viabilidad a algunos de sus propósitos a través de las Promesas. ¿Cómo alcanzarlas? Desarrollando una fe sólida que nos permita descansar en Dios. ¿Qué ocurre con quienes acarician la duda en su corazón? Dejan escapar grandes bendiciones, como agua entre los dedos. Por esa razón es necesario creerle a Dios bajo el convencimiento pleno de que su poder es ilimitado.

I.- Permanezca firme en las promesas de Dios (vv.1-3).

1.- Dios cumple siempre lo que promete (v. 1).

a.- Dios conoce cuando la ansiedad amenaza con robarnos la esperanza de recibir una promesa.

b.- Dios conoce cuando el temor amenaza con robarnos la esperanza de recibir una promesa.

c.- Dios conoce la incredulidad que amenaza con robarnos la esperanza de recibir una promesa.

2.- Dios nos recuerda que su poder es ilimitado para materializar sus promesas (v. 1).

3.- Dios nos fortalece y anima cuando la duda amenaza con robarnos la paz (vv.2, 3).

II.- Confíe plenamente que Dios tiene todo cuidadosamente calculado (vv.4, 5).

1.- Dios no hace promesas al azar.

2.- En Su plan perfecto, Dios cuida hasta los más mínimos detalles (v. 4).

a.- Dios tranquilizó a Abraham cuando la duda asomó a su corazón.

b.- Dios desea verle fortalecido en las promesas que Él ha hecho.

3.- Dios piensa en grande y como tal, tiene grandes promesas para nosotros (v. 5).

III.- Afírmese en la fe para alcanzar la promesa de Dios (vv.6, 7).

1.- La fe de Abraham agradó a Dios. Igualmente debe ocurrir con nosotros hoy (v. 6).

a.- Es necesario desarrollar la fe.

b.- Es necesario moverse en la fe.

c.- Es necesario esperar con fe.

2.- Recuerde siempre que hemos creído en un Dios de poder y de milagros (v. 7).

IV.- No permita que el enemigo le robe la bendición (vv.8-21).

1.- No deje que la duda anide en su corazón (v. 8).

2.- Permanezca fiel a Dios para alcanzar la promesa (vv.9, 10).

3.- manténgase alerta frente a los ataques del enemigo para robar su bendición (v. 11).

4.- Si permanecemos en Dios, la promesa que nos haya hecho se materializará (vv-12-21).

a.- Las circunstancias no impedirán que Dios cristalice sus planes en nosotros (vv.13-16).

b.- Dios confirma sus promesas (vv.17-21).

Conclusión:

Es probable que haya pasado algún tiempo desde que recibió una promesa de Dios. El paso de los días amenaza con llenarlo de desaliento. En tales circunstancias debemos afirmarnos en Dios. No podemos permitir que sucumbamos bajo la incredulidad a las puertas de ver materializadas las promesas divinas para nosotros.