¿Cómo evitar que su familia se desmorone?

1.- Lectura Bíblica: Salmos 127:1

2.-Meditación familiar:

Con un golpe seco sobre el escritorio, el juez dictó la sentencia. Todos en la sala se sorprendieron.

—Es justo —, murmuró alguien.

—Seis años por maltrato a sus hijas es mucho tiempo de encierro —, señaló otro, en medio de la audiencia.

El incidente se originó cuando el hombre, preso de la ira, golpeó a una de sus hijas adolescentes. Lo hizo tras comprobar que, por tercer año consecutivo, había perdido el curso académico.

Argumento ante el juzgado que no se pudo contener.

Sin embargo, y para sorpresa de muchos, la Sala de Casación Penal de la Corte de Justicia de Colombia, después de un cuidadoso análisis del caso, decidió absolverlo.

Uno de los atenuantes fue la actitud grosera de las menores de edad.

—Ya no respetaban a su padre —, comentó alguien cercano al hogar.

Incidentes así puede que no sean tan comunes. Lo que sí es frecuente, es el desmoronamiento en la relación entre los cónyuges y con sus hijos.

La prevalencia de los antivalores ha precipitado la mayoría de las crisis en las familias.

A menos que imprimamos un cambio definitivo en nuestra relación con Dios y en los principios que nos animan, nuestro propio entorno puede avanzar hacia el abismo.

Sin embargo, todavía hay esperanza. Así lo leemos en el libro de la familia:

“Si Jehová no edificare la casa, en vano trabajan los que la edifican; si Jehová no guardare la ciudad, en vano vela la guardia.” (Salmos 127:1 | RV 60)

Hay tres fundamentos para edificar familias sólidas:

• Orar por nuestro cónyuge e hijos, siempre.
• Pedir a Dios la sabiduría para manejar cada situación familiar de la cotidianidad.
• Asumir nuevos principios y valores a partir de lo aprendido en el libro de los triunfadores que es la Biblia.

El curso de nuestra vida familiar puede cambiar si le damos el primer lugar a Dios. Hoy es el día para tomar decisiones.

Usted es quien decide si continúa con la vida que ha llevado hasta hoy o emprende el proceso de transformación personal, espiritual y familiar que tanto anhela y necesita. Ábrale hoy las puertas de su corazón a Jesucristo.

3.- Oración familiar:

“Dios de los cielos, me dirijo hoy a ti para pedir misericordia para mi hogar. Reconozco que enfrentamos situaciones difíciles, en gran medida por manejar los conflictos y situaciones difíciles a mi manera. Pido tu sabiduría y orientación sobre qué hacer en cada momento de nuestra vida familiar. Rindo tu hogar en tus manos. Amén”

4.- Una meta familiar para hoy:

Pediré diariamente sabiduría a Dios para ayudar a edificar mi familia.