¿Cómo superar las crisis con ayuda de Dios?

Base Bíblica: 1 Samuel 30:1-9

Inicio:

Las crisis no son ajenas a ninguna persona. Surgen cuando menos las esperamos. Incluso, puede que al tomarnos por sorpresa, nos llevan a entrar en una enorme disyuntiva: ¿Qué hacer ahora? En momentos como ese es cuando debemos reconocer que hay aspectos complejos que humanamente no se pueden resolver, pero sí cuando le abrimos las puertas de nuestro corazón y de nuestra vida a Dios. Él nos asegura la victoria sobre los obstáculos y nos permite llegar siempre a nuevos niveles. I. Ninguna persona está exenta de enfrentar crisis (v. 7)

1. Aunque David era un guerrero preparado para las dificultades, enfrentó crisis que tocaron sorpresivamente a su puerta

a. La crisis tocó a las puertas de David (v. 7)

b. Las crisis surgen cuando menos lo esperamos

b.1. Algunas crisis son producto de nuestros errores

b.2. Algunas crisis obedecen a factores externos

2. La crisis por la cautividad de su nación y de su familia, era un asunto humanamente difícil de resolver

II. Debemos valorar la crisis en su verdadera dimensión (vv.4-6)

1. Es necesario que en medio de las crisis vivamos el duelo (vv. 4, 5)

2. Ningún hombre o mujer está al margen de las emociones producto de las crisis. No estamos llamados a cuestionar (v. 6)

3. Si tenemos equilibrio emocional, que Dios nos permite alcanzar, podemos enfrentar exitosamente las crisis

a. No debemos permitir que el enemigo nos robe la paz

b. Estamos llamados a conservar la serenidad y la calma en medio de las crisis

4. Las crisis las encaramos bajo el convencimiento de que podremos superarla

a. Es necesario buscar soluciones

b. No debemos enfocarnos en buscar culpables

5. En medio de las crisis hay varios pasos a seguir (v. 6)

a. Buscar a Dios

b. Fortalecernos en dios

b.1. Mediante la oración

b.2. Mediante la fe

b.3. Mediante la Palabra de Dios

6. Aún en medio de las crisis debemos reconocer y alabar a Dios

III. En medio de las crisis debemos confiar en Dios (vv.9-)

1. Toda decisión en medio de las crisis debemos someterla en manos del Señor (vv. 7, 8)

2. Debemos obedecer a Dios y movernos con pasos de fe (v. 9)

3. No hay que perseverar y no desmayar aunque encontremos obstáculos (v. 10)

a. Dios está con nosotros

b. Dios nos concede la victoria

c. Con pocas personas o recursos, o con mucha disponibilidad, Dios nos ayuda a superar las crisis

Conclusión:

Como hijos de Dios tenemos en Él nuestro poderoso ayudador. Él nos asegura la victoria en medio de cualquier circunstancia adversa. No estamos solos. Él, nuestro amado Creador, está presto para atender nuestros requerimientos y para brindarnos Su ayuda. Estamos llamados a la victoria en medio de las crisis. La victoria nos corresponde. Somos ganadores en Dios, y como tales, no hay obstáculo que nos pueda detener porque el Señor nos ayuda a superarlos.