Depender de Jesús para ser un discípulo fiel

Cuando comenzamos a caminar de la mano del Señor Jesús, experimentamos crecimiento en nuestra forma de pensar y de actuar, y esa transformación ejerce influencia entre las personas con las que interactuamos diariamente.

¿Qué impide que no prosigamos el camino apropiado en nuestra condiciómo de discípulos? La falta de perseverancia. Ahora, permanecer en el camino es posible si dependemos del Señor Jesús.

Nuestro amado Salvador lo dejó claro cuando enseñó a una multitud, a sus discípulos y a nosotros hoy: "Permanezcan en mí, y yo permaneceré en ustedes. Pues una rama no puede producir fruto si la cortan de la vid, y ustedes tampoco pueden ser fructíferos a menos que permanezcan en mí.” (Juan 15:4. NTV)

La intimidad con Jesús es la que nos permite, no solo seguir creciendo sino además, rendir fruto. Si no seguidos asidos de Su mano poderosa, ganará la partida nuestra naturaleza pecaminosa.

La permanencia en Cristo es necesaria

Lemuel es un cristiano de treinta años. Creció en un hogar cristiano pero rayando la adolescencia tuvo contacto con la marihuana y ésta a su vez, se convirtió en la puerta de entrada para drogas “duras”.

Ya en la juventud volvió a reencontarse con Jesucristo. Y a partir de ese momento las luchas que ha librado son permanentes por mantenerse firme.

Nuestro amado Salvador dio la clave para lograrlo: "Ciertamente, yo soy la vid; ustedes son las ramas. Los que permanecen en mí y yo en ellos producirán mucho fruto porque, separados de mí, no pueden hacer nada. El que no permanece en mí es desechado como rama inútil y se seca. Todas esas ramas se juntan en un montón para quemarlas en el fuego. Si ustedes permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pueden pedir lo que quieran, ¡y les será concedido! Cuando producen mucho fruto, demuestran que son mis verdaderos discípulos. Eso le da mucha gloria a mi Padre.” (Juan 15:5-8. NTV)

Si nos desprendemos de Su mano, volveremos atrás. Si por el contrario caminamos con Él, si desarrollamos intimidad en oración, cada día seguiremos avanzando en el proceso de crecimiento en todas las áreas de nuestra vida.

Estamos seguros que usted escogió ser discípulo de Jesús y ha probado los enormes beneficios de ser un seguidor de Èl. Nuestra sincera recomendación es que nunca deje de andar en el sendero de vida, de Salvación.

Podemos asegurarle que si dispone su corazón, llegará a un nivel alto de desarrollo en todos los ámbitos de nuestra existencia y como escribiera el apóstol Pablo “...hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento pleno del Hijo de Dios, a la condición de un hombre maduro, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo...” (Efesios 4:13. La Biblia de Las Américas)

No se dé por vencido. Hoy es el día para dar el primer paso que es recibir a Cristo — si aún no lo ha hecho — y de caminar tras Él. Podemos asegurarle que si Jesús es su capitán, quien guía sus pasos, podrá lograrlo.

¡Dios les bendiga siempre, y decidamos a seguir firmes en Cristo todos los días!