Escuchar a su cónyuge cuando hay conflictos, ayuda mucho
1.- Lectura Bíblica: Eclesiastés 4:12
2.- Meditación familiar:
Roberto tuvo un enfrentamiento con un compañero de trabajo. La dificultad surgió por algo trivial, pero todo se hizo más complicado porque se fueron a las palabras fuertes. Ahora, tras una jornada ardua, los dos estaban a las puertas de ser sancionados. El hombre sólo quería llegar a casa y contarle el asunto a su esposa. Ella, tras oírlo, no sabía cómo actuar.
Si enfrentó alguna vez la disyuntiva de qué hacer para ayudar a su pareja que tiene conflictos en el trabajo, la respuesta sencilla y práctica es: Aprenda a escuchar. Guarde silencio pero preste atención a su cónyuge cuando habla. A veces simplemente actuar así ayuda muchísimo.
No en vano usted y yo, en nuestra condición de componentes de la pareja, somos de mucho apoyo. El rey Salomón lo describe así: "Y si alguien puede prevalecer contra el que está solo, dos lo resistirán. Un cordel de tres hilos no se rompe fácilmente.” (Eclesiastés 4:12. La Biblia de Las Américas)
Los componentes de la pareja, en unidad y caminando de la mano con Jesús el Señor, se tornan invencibles por encima de las tormentas que puedan venir.
Cortar la conversación y decirle a tu esposo o esposa: “Yo tengo mis propios problemas", no ayudará; por el contrario, agigantará el conflicto.
Es necesario obrar prudentemente porque al fin y al cabo la persona con problemas laborales busca expresarse en un lugar que considera seguro: Su hogar.
"La idea de que los problemas del trabajo no entren a la casa no funciona porque hoy las vidas de todos se mezclan de tal manera que no hay límites claros entre estas dos esferas de la vida. “Además, el hogar es el sitio donde la gente se siente más protegida”, dice la psicóloga Claudia Peralta, experta en temas laborales. Pero los estudios muestran que este negativismo no solo torpedea la relación, sino también podría empeorar la situación en el trabajo. Esto sucede porque, a pesar de sus buenas intenciones, las parejas no saben cómo afrontar estas molestias.” (Artículo: “Con sus quejas a otra parte”. Revista Semana. 17/08/2015. Edición digital. Colombia)
Saber callar pero al menos escuchar, es un camino apropiado. La explicación es sencilla. Póngase en el lugar de su cónyuge. Ahora, mírelo con la siguiente perspectiva: Tiene impases donde labora y, al llegar a casa, hay enfrentamientos cuando quiere hablar del asunto. El resultado será un ambiente pesado e insostenible que afectará las relaciones interpersonales de la pareja.
Por el contrario, cuando brindamos una voz de aliento y mostramos empatía, el panorama luce más prometedor para quien — por efecto de las circunstancias — se encuentra en el ojo del huracán. Ahora, si el asunto es que no sabe que decir, pues no diga nada. Simplemente escuche a su cónyuge. Piense que quizá en un futuro será usted quien requerirá de apoyo y comprensión.
3.- Oración familiar:
“Amado Dios y Padre te damos gracias porque, por encima de las circunstancias difíciles, sabemos que contamos contigo en todo momento. Oramos delante de Tu Presencia que nos concedas la sabiduría necesaria para manejar adecuadamente los conflictos cuando se presenten. Sometemos nuestra vida familiar en tus manos. Amén”
4.- Una Meta familiar para hoy:
Procuraré dejar en mi trabajo los problemas del trabajo y no llevarlos a casa. Pediré a Dios su orientación al respecto.
Publicado en: Altar Familiar
Copia el siguente texto a tu muro de Facebook:
https://www.mensajerodelapalabra.com/site/index.php/escuchar-a-su-conyuge-cuando-hay-conflictos-ayuda-mucho/
Temas Relacionados:
Un consejo oportuno con fundamento en la Biblia.