La obediencia a Dios, fundamento para ser bendecidos

1.- Lecturas Bíblicas : Jeremías 29:11; Proverbios 10:22; Génesis 12:1-4; Salmos 128:1, 2.

2.- Una ruta bíblica a las bendiciones:

Concluye un año. Cada quien tiene su propia apreciación. ¿Fue muy bueno o, por el contrario, estuvo lleno de momentos difíciles? La evaluación la hace quien. Ahora, cualquiera que sea su apreciación, permítame decirle que Dios nos creó para ser bendecidos.

Dios desea para nosotros lo mejor de lo mejor. El profeta Jeremías, inspirado por el Señor, escribió: "``Porque yo sé los planes que tengo para vosotros — declara el SEÑOR — ``planes de bienestar y no de calamidad, para daros un futuro y una esperanza.” (Jeremías 29:11: La Biblia de Las Américas)

Sobre esa base, piense en lo más maravilloso que podría ocurrirle. Es más, le invito para que elabore un listado. ¿Qué bendiciones querría de Dios? No esolo para lo que resta del año sino para el que viene.

¿Ya lo hizo? Si es así, sepa que Dios puede hacer realidad esos anhelos. La decisión no depende de Él sino de usted, como enseña el salmista: "La bendición del Señor enriquece a una persona y él no añade ninguna tristeza.” (Proverbios 10:22. NTV)

Lea el texto una y otra vez. ¿Encontró el eje principal? Sí, son las bendiciones. Y las bendiciones no son solamente materiales. Son espirituales, en la relación familiar, en el trabajo, en la materialización de nuestros sueños y, por supuesto económicas. Pero las finanzas no son el centro de todo. El centro de todo es y debe ser siempre nuestro amado Dios.

Después de haber leído hasta aquí, quizá se pregunte: ¿Cómo comienzo a recibir las bendiciones? la respuesta es sencilla: Cuando se decida a ser obediente a Dios. Ese es el primer y más grande paso.

Las Escrituras nos enseñan cuál fue la ruta que siguió Abraham: "El Señor le había dicho a Abram: «Deja tu patria y a tus parientes y a la familia de tu padre, y vete a la tierra que yo te mostraré. Haré de ti una gran nación; te bendeciré y te haré famoso, y serás una bendición para otros. Bendeciré a quienes te bendigan y maldeciré a quienes te traten con desprecio. Todas las familias de la tierra serán bendecidas por medio de ti».Entonces Abram partió como el Señor le había ordenado, y Lot fue con él. Abram tenía setenta y cinco años cuando salió de Harán. “ (Génesis 12:1-4. NTV)

La obediencia es esencial. Es una decisión que debemos tomar hoy, como lo hizo Abraham en su momento. Fue obediente a Dios. Se decidió por las bendiciones y las recibió.

El salmista David coincide con la obediencia como la fórmula para recibir las bendiciones de Aquél que todo lo puede: “¡Qué feliz es el que teme al Señor, todo el que sigue sus caminos! Gozarás del fruto de tu trabajo; ¡qué feliz y próspero serás!” (Salmos 128:1, 2. NTV)

Sin duda desea ser bendecido. ¡Felicitaciones! Ahora, abra las puertas de su vida a esas bendiciones. ¿De qué manera? Recibiendo a Jesús como su Señor y Salvador. Es una decisión de la que jamás se arrepentirá porque, prendidos de la mano de Jesucristo, emprendemos el proceso de crecimiento personal y espiritual que tanto hemos anhelado.

3.- Promesas de bendición para hoy:

- Dios desea bendecir nuestra vida a nivel personal

- Dios desea bendecir a nuestra familia

- Dios desea bendecir todo cuanto hacemos

4.- Preguntas para reflexionar y crecer:

a. ¿Cuál es el propósito de Dios para nuestras vidas, cada día (Jeremías 29:11)?

b. - ¿Qué apreciación tengo de lo que son las bendiciones?

c.- ¿Cuáles son las bendiciones que he recibido de manos del Señor hasta hoy?

d.- ¿Qué me enseña la Biblia en cuanto a la fuente de mis bendiciones (Proverbios 10:22)?

e.- Hablando de bendiciones, ¿qué puedo aprender de la decisión que tomó Abraham (Génesis 12:1-4)?

f.- ¿Cuál es el fundamento para las bendiciones de acuerdo con lo que enseña la Palabra de Dios (Salmos 128:1, 2)?

5.- Oración:

"Mi amado Dios y Padre de los cielos, te doy gracias por este día que me regalas. La vida misma es una enorme bendición que quizá no he valorado hasta hoy. Permite mi amado Señor que siempre pueda caminar tomado de Tu mano, y reciba no solo las bendiciones que tienes guardadas para mí desde antes de los tiempos, sino que también y como lo promete Tu Palabra, esas bendiciones alcancen a mi familia. En tus manos quedamos. Amén"