Las 7 preguntas más frecuentes de nuestros hijos

1.- Lectura Bíblica : 1 Corintios 13:4, 5

2.- Meditación familiar :

“Con mi hija apenas nos cruzamos palabra”, decía una madre de familia, presa de la desesperación: “Realmente no se qué hacer para volver a tener el diálogo de otros tiempos”.

En un mundo de avances tecnológicos en el cual es posible desde nuestro lugar de trabajo controlar — mediante cámaras de seguridad en casa — , lo que están haciendo los hijos, y en el cual hablar con ellos está a la distancia de un clic, resulta irónico que en la adolescencia parezca imposible entablar un diálogo con ellos.

De ser por naturaleza chicos y chicas tiernos, amables y de buen genio, se convierten en muchachos y muchachas retraídos, rebeldes, altaneros, que prefieren estar con sus amigos más que con sus progenitores.

Los desajustes que experimentan los hijos en su personalidad están ligados a los cambios en su cuerpo. Para unos y otros tenemos que estar preparados como padres; pero algo más: para asumir un nuevo rol, construyendo puentes que nos permitan llegar hasta ellos, en su mundo que por momentos nos resulta inaccesible, con el ánimo de sentar bases sólidas de amistad.

Las circunstancias nos obligan a prepararnos para manejar situaciones conflictivas con ellos. Y uno de los pasos de mayor significación es aprender a conocerlos en esa nueva etapa de su vida.

Como anotábamos, para ser amigos de los hijos e hijas adolescentes es necesario tener un conocimiento panorámico de su pequeño mundo, y por supuesto, de los conflictos internos y externos que enfrentan.

¿Se ha preguntado qué inquietudes tienen sus hijos? Le compartimos al menos 7 de ellas:

Entre otras, las preocupaciones que les asaltan a los hijos adolescentes son:

1.- ¿Me aceptan mis padres?

2.- ¿Cuál es mi futuro?

3.- ¿Tendré oportunidad de estudiar? Si es así, ¿qué debo estudiar?

4.- ¿Cómo debo manejar mis emociones?

5.- ¿Por qué debo obedecer la autoridad de mis padres?

6.- ¿Por qué no puedo hacer lo que quiero?

7.- ¿A qué edad podría irme de casa?

No olvide que se construye amistad a partir del diálogo, y si en sus primeros acercamientos a sus hijos e hijas adolescentes tiene confrontaciones, trate de manejar el asunto con mesura, deles un compás de espera, no se desanime y vuelva a intentarlo.

Desconozco cuál sea su experiencia, pero en esencia un sentimiento que debe prodigar a sus hijos es el amor. El apóstol Pablo escribió: “ El amor es paciente, es bondadoso. El amor no es envidioso ni jactancioso ni orgulloso. No se comporta con rudeza, no es egoísta, no se enoja fácilmente, no guarda rencor.” (1 Corintios 13:4, 5)

Como padres debemos tender puentes de entendimiento con nuestros hijos a través del amor. Ese amor es el que nos permite entenderlos y ayudarlos cuando más nos necesitan.

No podríamos concluir sin antes invitarle para que le abra las puertas de su corazón al Señor Jesús. Él traerá cambios a su vida personal, espiritual y familiar. Decídase hoy por Jesucristo. No se arrepentirá.

3.- Oración familiar:

“Dios de los cielos, muchas gracias por este nuevo día que nos regalas como familia. Te pedimos que nos concedas la sabiduría necesaria para entender a nuestros hijos, escuchar sus inquietudes y ayudarles a resolver aquellos aspectos que les inquietan. En tus manos sometemos este día. Amén”

4.- Una Meta familiar para hoy:

Procuraré sacar tiempo cada día para hablar con mis hijos.