No renuncie a luchar por lo mejor de la vida

1.- Lectura Bíblica: Salmos 18:6

2.- Versículo para memorizar:

“En mi angustia invoqué al SEÑOR, y clamé a mi Dios; desde su templo oyó mi voz, y mi clamor delante de El llegó a sus oídos.” (Salmos 18:6)

3.- Reflexión en la Palabra de Dios:

Media hora después de hablar con su mejor amigo, Alberto se quitó la vida. Ni su familia ni sus allegados lo vieron venir. Estaba sumido en una depresión profunda y no supo pedir ayuda. Este es el caso de miles de hombres de todo el mundo que acuden al suicidio.

Estudios estadísticos indican que la tasa de este género va en aumento, mientras que el de las mujeres ha disminuido.

Sólo en Reino Unido, en 2011 se registraron 12 suicidios diarios de hombres, la mayoría entre 45 y 55 años.

¿Qué está causando este fenómeno? “Muchos de los motivos son pérdidas de dinero, de trabajo, deudas y fracasos profesionales", le dijo a la la BBC el psiquiatra Peter Byrne, del hospital de la Universidad de Newham (BBC Mundo. Edición digital. 12/03/2013).

Por su parte, Jane Powell, directora de la Campaña contra una vida miserable, explica que el actual clima económico mundial es el gran causante de que se hayan disparado los suicidios en hombres.

Hace un año Wilson Stephens intentó quitarse la vida. La presión de crear una empresa se sumó a una crisis de pareja y a un juicio que tuvo que enfrentar."Todo se estaba derrumbando, no lo podía superar y traté de suicidarme", le dijo a la cadena internacional de noticias.

Un de las principales razones es que para los hombres es muy difícil decir ’necesito ayuda’. Se supone que somos fuertes.

En muy pocas oportunidades se crea un espacio en el que los hombres se sientan cómodos para hablar de sus problemas, de las presiones a las que se enfrentan. Esto los hace más vulnerables.

Si se encuentra en una situación desesperada, el mejor camino es reconocer su condición y pedir ayuda.

Inicialmente busque ese apoyo en Dios, a través de la oración, como enseñó el rey David cuando se encontraba inmerso en una condición de desespero que bien pudiera haberle llevado al suicidio: “En mi angustia invoqué al SEÑOR, y clamé a mi Dios; desde su templo oyó mi voz, y mi clamor delante de El llegó a sus oídos.” (Salmos 18:6)

Y el segundo paso, después de entregar al Señor nuestra situación, es buscar ayuda profesional. ¡El Señor le ayudará!

Piense por un instante que hay muchos amaneceres y atardeceres por disfrutar y que la vida, en medio de las vicisitudes, es muy hermosa. Sonríale a cada nuevo día. Es una oportunidad que Dios le ofrece.

Y si aún no ha recibido a Jesucristo como Señor y Salvador, hoy es el día para que le abra las puertas de su corazón. Puedo asegurarle que no se arrepentirá.

4.- Preguntas para el crecimiento personal y espiritual:

a.- ¿Ha pensado alguna vez en quitarse la vida?

b.- ¿Qué medida tomó en esos momentos de desesperación?

c.- ¿Buscó al Señor en oración?

d.- ¿Encuentra paz en la oración cuando atraviesa por momentos de dificultad?

e. - Hoy es el día para someter al Señor todo aquello que amenaza robarnos la paz interior